Humor en la Arquitectura: Muros de mampostería confinada
"No importa, nadie lo notará al final" dice. Aquí te explicamos qué son los muros de mampostería confinada y porque es peligroso lo que se ve en la imágen.
¡Peligro al construir!
Si alguna vez pensaste hacer tu casa sin ayuda de profesionales, ¡esta imagen te hará pensarlo dos veces!
Aquí tenemos a nuestro "albañil estrella" (supongo que es el dueño que dijo "yo lo puedo hacer") intentando darle un toque "abstracto" a su obra. Pero, por supuesto, el arte y la construcción no siempre deben ir de la mano.
Miren de cerca esa mampostería confinada que, usada con tanto "estilo" en la foto, es en realidad usa un proceso común para edificar casas. Y sí, aunque no lo crean, hay edificios que con valentía, usan este sistema, pero solo se atreven a tener tres o cuatro niveles, porque las normas saben que hay límites para todo.
Dentro de esta técnica de construcción, el muro (que aquí luce como si hubiera sido construido después de una fiesta) está abrazado por soportes verticales (llamados castillos) y amarrado por bandas horizontales llamadas dalas. La magia detrás es que, de esta manera, el muro puede soportar fuerzas y mantener el edificio en pie.
A diferencia del sistema de marcos rígidos, que tiene trabes y columnas para que las paredes no tengan que hacer todo el trabajo pesado, con la mampostería confinada, es el muro quien sostiene las cargas del techo.
Esto es ideal para quien quiere muchas habitaciones, no por un diseño arquitectónico genial, sino porque... bueno, el muro ya está ahí, ¿por qué no usarlo? además de que sale más barato aprovecharlo.
El problemón con el muro en la imagen es que parece que fue hecho en un día de resaca. Materiales de baja calidad, tabiques que parecen no conocer la palabra "traslapo" y una construcción que definitivamente ignora los conceptos de "recto" y "nivelado". Evidentemente el muro no resistirá la carga de la losa ni las fuerzas horizontales por sismos o viento. Convirtiéndose en un peligro.
Así que, cuando piensen en construir su palacio de sueños, ¡háganlo bien! Contraten a profesionales. Porque, como siempre decimos: ¡Mejor prevenir que tener que llamar a la brigada de albañiles de emergencia! 😉
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