Zaha Hadid: Un anillo como una casa

Zaha Hadid no solo dejó su huella en la arquitectura con sus formas fluidas y vanguardistas, sino que también llevó su visión a otros mundos, como la moda y la joyería. Su estilo siempre fue audaz: en sus inicios, diseñaba y confeccionaba su propia ropa, pero cuando su carrera despegó, optó por vestir las creaciones de diseñadores como Martin Margiela y Sybilla.

Sin embargo, Hadid nunca abandonó su pasión por el diseño personal. Dibujaba joyas imponentes, principalmente anillos y brazaletes, creando prototipos con impresoras 3D mucho antes de que esta tecnología fuera común en el diseño.



Su pasión tomó forma en una colección exclusiva para la icónica casa de joyería danesa Georg Jensen, presentada en Baselworld, la feria de joyería más importante del mundo. Esta colaboración marcó un hito, ya que ambas firmas poseen un estilo tan distintivo que es raro encontrar una fusión tan natural. Al ver las piezas, se reconocen de inmediato tanto la esencia de Hadid como la tradición de Georg Jensen.

Hadid nunca diseñaba pensando en encajar en una marca. Su identidad era tan fuerte que cualquier objeto creado por ella llevaba su sello inconfundible. Ya sea diseñando edificios, mobiliario o prendas de vestir, su visión dominaba el resultado final.

No fue la primera vez que sus formas arquitectónicas se traducían en diseño de moda. Hadid fue la primera mujer en ganar el Premio Pritzker de Arquitectura en 2004, y su trabajo también se ha plasmado en objetos más allá de los edificios. Firmó diseños para Adidas, Louis Vuitton y Swarovski, cada uno con su toque característico.



La idea de la colección de joyas surgió de un encuentro casual. Durante la inauguración de su proyecto Wangjing Soho en Pekín, el director creativo de Georg Jensen, David Chu, notó las joyas que Hadid llevaba puestas. Ella le explicó que eran prototipos, y una semana después, Chu viajó a su estudio en Londres para conocer toda la colección.

Georg Jensen, una firma con más de un siglo de historia, es reconocida por crear piezas modernas y atemporales. Su enfoque estético, basado en líneas naturales, encontró en Hadid una aliada perfecta.

La colección resultante incluye cinco anillos y tres brazaletes, inspirados en las formas fluidas de la arquitectura de Hadid. Utiliza estrías y curvas que recuerdan sus edificios, como las torres Wangjing Soho, donde el movimiento y la fluidez son esenciales.



En esta colaboración, Georg Jensen rompió con su clásico minimalismo para apostar por diseños más atrevidos. Las piezas, elaboradas en plata o en radio con incrustaciones de diamantes, desafían la rigidez de la joyería tradicional. Su diseño ergonómico hace que los brazaletes se adapten al cuerpo de manera natural, como si fueran una extensión de la piel.

Hadid siempre aseguró que la arquitectura no se podía traducir literalmente a otros objetos, pero admitía que su trabajo era una constante reinterpretación de formas. En esta colección, sus ideas sobre diseño se materializan en pequeñas esculturas portátiles, piezas de arte que se pueden llevar puestas.

Este proyecto no solo demuestra la versatilidad de Hadid, sino que también plantea una pregunta interesante: ¿hasta dónde puede llegar un arquitecto? Para ella, la respuesta era clara: no había límites. Zaha Hadid

---

Agregar un comentario

Por favor llene completamente la forma abajo, y nosotros agregaremos su comentario tan pronto como sea posible.

Una calificación: (1 malo 5 muy bueno)

1

2

3

4

5

Estoy calificando:

Asunto:

Escriba su comentario:

Su Nombre:

Su Correo Electrónico:

 Siguiente Artículo >>