Estudiantes diseñan base lunar y ganan 1,700 dólares
En colaboración con la Agencia Europea Espacial (ESA), estudiantes de arquitectura diseñan base lunar para la permanencia de humanos en el satélite.
Con la idea de participar en la competencia de la
Moon Village Association, estudiantes diseñan habitáculos en la Luna, el satélite explorado entre 1969 y 1975.
Estos edificios lunares tiene el propósito de brindar protección y seguridad a una colonia hipotética en la Luna, donde las condiciones externas son dramáticas y externas.
La luz solar, los cambios de temperatura, el tipo de terreno y el nivel de gravedad juegan un papel en el diseño de un concepto adecuado.
Al carecer de atmósfera o de un campo magnético, cualquier base lunar también debe proteger a sus habitantes de la radiación y de los pequeños meteoritos que caen todo el tiempo en la superficie.
Uno de los diseños para el concurso es del estudiante de ingeniería de la Universidad Técnica Nacional de Atenas, Angelus Chrysovalantis Alfatzis, que junto con su equipo crearon el prototipo ganador.
"Siempre me esfuerzo por encontrar soluciones materiales y estructurales de acuerdo con los recursos disponibles en el sitio", dice el estudiante, quien contempla usar el suelo lunar como material de construcción.
El concepto se basa en emplear uno de los incontables cráteres lunares como centro de la base.
El más cercano a la superficie se convertirá en la escotilla de aire, la instalación de tratamiento de desechos y el área de servicio para misiones extravehiculares.
El módulo de en medio serviría como centro de investigación y comunicación. El más bajo contendría las habitaciones. Cada uno incluiría un sistema de soporte vital autónomo. Y los tres estarían conectados por un ascensor que opera a través de un tubo central.
Mediante módulos inflables enviados directamente a un cráter en la región polar sur de la Luna.
Al quedar parcialmente enterrada, la base quedaría bien resguardada .
Módulos subsiguientes se apilarían sobre el primero hasta conformar la base.
“Los medidores de blindaje protegerán a los que están dentro de la radiación. Construir dentro de un cráter también ayudará a aislar debido a la temperatura estable del ambiente subterráneo de la Luna y proporciona cobertura contra la amenaza de los micrometeoroides”, dijo Alfatzis.
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