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Pabellón flotante en Brasil

No se necesita mucho para crear arquitectura. Solo dos planos: un piso y un techo para contemplar un lago.

Bruno Rossi, pabellón flotante,

Eso fue lo que hizo el arquitecto brasileño Bruno Rossi en este embarcadero en una presa en Santo Antonio de Posse, Brasil.

La idea era ampliar el área con una intervención mínima, usando solo madera.

En total, la superficie es de apenas 80 metros cuadrados, conformados por una sola cubierta y un techo que proporciona sombra.

Sin embargo, hay que apreciar los detalles del techo.

Para empezar, la delicadeza con que las columnas de madera cuentan con un apoyo de acero inoxidable para conectarse con la cubierta. En apariencia sencillo, este conector protege la madera del agua, evitando que con el paso del tiempo esta se pudra o afecte.

En total son 8 columnas, que soportan el techo, compuesto por una serie de ménsulas de madera.

El techo está hecho de un material termoacústico que controla la temperatura y convierte las ondas sonoras en energía térmica.

Los costados están protegidos por una serie de persianas de madera abatibles, que inhiben los rayos solares y que direccionan los vientos.