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Fran Silvestre Arquitectos, una arquitectura pequeña en lo grande y grande en lo pequeño

Este es un pequeño perfil de uno de los despachos españoles de mayor proyección a nivel mundial.
Fran Silvestre Arquitectos, una arquitectura pequeña en lo grande y grande en lo pequeño La arquitectura es una disciplina en la que de manera constante se ponen en juego múltiples factores, que además de atender las necesidades propias de un proyecto (forma, estructura, funcionalidad, etc.), implica el análisis de su contexto natural, social, cultural e histórico, así como el deseo de buscar la belleza a través de la obra construida.

La creación en el ámbito arquitectónico, supone un proceso de análisis en el que participan sensaciones, emociones e imágenes que persiguen la satisfacción en su sentido más amplio.

Esto lo tiene muy claro el despacho Fran Silvestre Arquitectos, dirigido por Fran Silvestre y María José Sáez Domingo, cuyas obras son el resultado de una metodología de trabajo minuciosa, precisa y compleja, que antes de revisar los problemas formales y el vocabulario arquitectónico comienza por conocer el lugar, su geografía y su historia.

Para estos jóvenes arquitectos, en el despacho, el diálogo siempre está presente, ya que consideran que a partir del intercambio de ideas se produce un ambiente de creatividad compartida capaz de generar una motivación contagiosa, cuidando de lo que está en proceso e ilusionado en lo que está por venir.

Así, mediante el diálogo, han podido concretar de la mejor manera posible, espacios confortables, útiles y de gran belleza, cualidades que históricamente han diferenciado a la arquitectura de las otras artes.

A lo largo de su carrera profesional, han llevado a cabo trabajos muy diversos, algunos realizados con presupuestos holgados y otros con presupuestos más reducidos, sin embargo, en todos los casos, han prestado una gran atención a la economía, sin desperdicios.

Para ellos el tamaño o los recursos materiales de los proyectos no definen la calidad de arquitectura, ya que una de las premisas de su trabajo es que “La arquitectura puede ser pequeña en lo grande o grande en lo pequeño, si cada encargo se entiende como una oportunidad de materializar un buen proyecto.”

En sus proyectos, forma, función y otras muchas variables van de la mano y se integran según las necesidades específicas de cada cliente, presupuesto y contexto.



Otra de sus premisas de trabajo ha sido la continuidad, concepto que utilizan a partir de diversas perspectivas: el entorno, el espacio arquitectónico, el uso de los materiales, la integración de las instalaciones, de la iluminación y, el tiempo, valorando que la arquitectura debe ser es capaz de atravesarlo sin quedar obsoleta, puesto que ésta siempre está en el mañana, está para las personas que van a venir después.

Esta visión de la continuidad y el tiempo, la enfatizan en muchos casos a partir del uso de nuevos materiales y tecnologías, basándose no sólo en la pura idea de lo nuevo sino en la experiencia y la mejora de la tradición; de hecho, en sus obras hacen evidente que tradición y modernidad van siempre de la mano.



La manera en que se enfrentan a cada proyecto es siempre diferente, en ocasiones encuentran soluciones de forma espontánea, en otras, a partir del dibujo o mediante la construcción de maquetas.

De esta forma, ideas y modelos van de la mano, de hecho, en muchas ocasiones, a las maquetas les asignan un nombre o las explican mediante la reflexión escrita.



Tanto para Fran Silvestre y María José Sáez Domingo, el trabajo docente es de suma importancia y lo valoran mucho, de hecho, Fran Silvestre es actualmente Subdirector de la Escuela de Arquitectura de Valencia, en la que también imparte clases como Profesor del Departamento de Proyectos.

Como docente, Fran Silvestre ve que cada alumno tiene un potencial inmenso y que si se motiva de manera adecuada puede llegar a hacer grandes proyectos.

En sus clases, intenta transmitir la ilusión de la profesión a los alumnos, para que se den cuenta de que lo que hacen realmente es divertido.



Una de sus obras, que mejor refleja su postura en torno a la calidad arquitectónica es la “Casa del Atrio”, galardonada recientemente con dos importantes premios, MHK y COACV. Esta casa, está ubicada en una zona urbana que parte del deseo de maximizar la sensación de amplitud.

Para ello, utilizaron dos estrategias: liberar la mayor superficie posible en el centro del terreno para dar un efecto de mayor amplitud; y aprovechar el desnivel existente con el barranco próximo para iluminar el sótano, lo cual le posibilita acoger parte del programa.



La edificación se desarrolla a lo largo de los lindes Sur y Oeste de la parcela, que junto a los elementos que componen la urbanización del solar, configuran una suerte de atrio, cuya diagonal fuga hacia una visión lejana de la Sierra Calderona.

El acceso se produce acompañado por la fachada Sur hasta encontrar el punto de intersección. En este lugar de visión privilegiada se ubica el distribuidor que junto a la escalera y la cocina vertebran el funcionamiento de la vivienda.

La zona Sur en la que se disponen las estancias de día, desmaterializa su presencia gracias a la luz cenital.

En la zona Oeste las habitaciones recaen a una porción de parcela con una escala más doméstica, mientras la habitación principal se asoma a la luz de levante reflejada sobre el agua.

En la parte oscura del sótano se encuentran el garaje y la bodega. El resto de usos del programa miran al barranco a través del cual se iluminan.



La Torre Eólica es otra de sus obras más conocidas, que forma parte de un importante proyecto desarrollado conjuntamente por la Universitat Politècnica de València (UPV), el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE).

La Torre Eólica es una edificación urbana capaz de abastecer a la propia población sin necesidad de transportar la energía, cuenta con una altura de 170 metros, y gracias a sus grandes superficies de fachada, cimentación y posición elevada, es capaz de aprovechar los recursos naturales del lugar para transformar la energía solar, geotérmica y eólica, en energía eléctrica.

Además de ello, la Torre cuenta con un mirador en la última planta, un restaurante y Los avances tecnológicos permiten que este gran volumen vertical pueda abastecerse de energías renovables, como la geotérmica, solar y eólica, para así poder producir hasta 3,600 megavatios/hora anuales.

En este proyecto, conjugan de manera muy exitosa, técnica y estética, en una estructura que puede leerse casi como una pieza de escultura.

Uno de sus últimos proyectos es la Torre Kouros, un edificio que se desarrolla en bandas orgánicas e color blanco. Estos elementos que se repiten verticalmente nos recuerdan muchos al Museo Guggenheim de Frank Lloyd Wright.

Para los arquitectos de este despacho, esta torre “aspira a tener la capacidad de atravesar el tiempo y no quedar obsoleto, adaptándose a las condiciones físicas y sacando el máximo partido de las mismas para presentar la situación de una forma innovadora”.

El conjunto consta de dos torres circulares que cuentan con un núcleo común de circulaciones verticales.

Un amplio basamento contiene una zona comercial; en al cubierta de este podio se desarrollan las áreas comunes como piscina y gimnasio.


Imágenes: Casa del Atrio.




































En general, la obra de Fran Silvestre Arquitectos, es un ejemplo de que el ejercicio de la arquitectura en la actualidad, más allá de plantear soluciones inamovibles, promueve un ejercicio reflexivo, que además de que hace evidente su función social, no deja de ser un arte que alimenta el goce estético, tan necesario para el bienestar espiritual del ser humano.



Fran Silvestre Arquitectos:

Este estudio está formado por diez arquitectos dirigidos por Fran Silvestre (Profesor del Departamento de Proyectos y Subdirector de la Escuela de Arquitectura), en colaboración con Mª José Sáez, cuentan con la ayuda habitual en sus proyectos de otros estudios tales como el de Alfaro Hofmann en Diseño Interior, el de UPV | David Gallardo Llopis en Diseño y Cálculo de Estructuras y el de UPV | ACARMA en Acústica.

Fran Silvestre ha colaborado también con el arquitecto Álvaro Siza Vieira, premio Pritzker y Doctor Honoris Causa por la Universidad Politécnica de Valencia.

El estudio ha recibido primeros premios en el Concurso peninsular para la remodelación de la cripta de la colonia Güell_ Antoni Gaudí (Barcelona), Concurso Nacional Fundación Caja de Arquitectos (Barcelona), Concurso para la remodelación del eje Prado Recoletos (Madrid) (como colaborador de Álvaro Siza Vieira | Oporto), del Colegio de Arquitectos de Granada_ Edificio Zaida expuesto en el MOMA_ On Site (Nueva York) (como colaborador de Álvaro Siza Vieira | Oporto), Concurso Nacional de Auditorio y Galería Arte Contemporáneo Edgar Neville (Valencia) y Concurso restringido de Centro Comercial, Jardín Público y Edificio de viviendas en Bétera (Valencia).

Actualmente el despacho tiene a su cargo más de veinte proyectos, entre ellos un proyecto en Córdoba, varios en Madrid, una sala de conciertos dentro de uno de los tinglados del puerto de Valencia, y un Centro Cultural también en Valencia.















Fran Silvestre Arquitectos

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Lista de comentarios

0 de 41 de los participantes encontró que el siguiente comentario es útil:
gIGaIZhJEOrBCbQ , 2012-07-23
Comentarios por: Brice
aSGEdlxeSDACfsndIrJ
 
Un arquitecto debe abessarrte del dinero , su objetivo es garantizar el funcionamiento y la estabilidad de su arquitectura, facilitando la tarea de desarrollo, velando por su correcto uso, y proporcionando el soporte y evolucif3n adecuada para superar los obste1culos te9cnicos que se encuentren durante su vida util.
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