Escuela construida con tubos de diferentes diámetros. RCR/Puigcorbé arquitectes
Esta guardería municipal, ubicada en la localidad de Besalú fue proyectada por el despacho RCR (Aranda, Pigem y Vilalta) con una arquitectura sencilla, en donde uno de los recursos más importantes es el juego de líneas y transparencias.
El nuevo edificio, situado en la calle Jacint Verdaguer, es de un solo nivel. Su perímetro está hecho de cilindros de colores y en el interior hay pocas paredes de obra y mucho vidrio, lo que permite que la luz penetre en casi todos los espacios.
También llama la atención el suelo, que es de un material sintético blando.
Más allá de que con sus materiales esta
escuela plantea originales soluciones estéticas, el edificio proyectado por RCR es innovador desde el punto de vista técnico, ya que hace uso de la geotérmica, es decir, aprovecha el calor y el frío provenientes del subsuelo para proveer los sistemas de calefacción y de refrigeración.
Con el fin de aislar el edificio del exterior, la cubierta está equipada con un colchón térmico. Todo ello busca la eficiencia y el ahorro energético.
Esta guardería, además de su arquitectura, presenta otra novedad: la puesta en práctica de un programa de alimentación ecológica en los comedores de este centro y de la escuela Vilarrasa, en colaboración con el Departamento de Agricultura.
Debido a lo anterior, el proyecto arquitectónico de la guardería fue dotado de una cocina, para que los almuerzos de los alumnos no se tengan que trasladar y puedan preparase y almacenarse ahí mismo.
RCR arquitectes
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