Muere el arquitecto japonés Arata Isozaki, ganador del premio Pritzker 2019 y autor del Palau Sant Jordi
Nacido en Oita, en la isla de Kyushu, en 1931, Arata Isozaki viajó por todo el mundo, antes de empezar a construir. Aprendió así no solo de la arquitectura tradicional, también de la vanguardia tecnológica y artística. Y esa mezcla de intereses fraguó en una obra que, con frecuencia, refleja más el tiempo que los lugares.
Arquitecto japonés. Siguió las tendencias del grupo de la segunda generación de arquitectos japoneses, los denominados metabolistas -en el que se integran Kenzo Tange, Kiyonori Kikutake, Masato Otaka o Sachio Otani-, aunque no se puede decir que formalmente pertenezca a éste.
Centro nacional de Convenciones Qatar
Este grupo, fundado en 1960, se entregó al urbanismo utópico: su arquitectura es en general orgánica y monumental, de formas vanguardistas que aluden a la industria, pero que también hacen referencia a la tradición japonesa, tal y como se muestra en ese característico aspecto de obra inacabada y visionaria, del que es buena muestra la ciudad espacial de Isozaki.
Kyoto Concert Hall
Hijo mayor de un rico empresario, hizo sus estudios en la Universidad de Tokyo. En 1953 se incorporó al seminario del antes citado Kenzo Tange, quien dirigirá al año siguiente su tesis de graduación titulada Desarrollo de los rascacielos en Estados Unidos, 1875- 1935. Concluidos sus estudios universitarios permaneció hasta 1963 junto al equipo de Tange y del URTEC. Tomó parte en casi todas las obras del estudio, en las que dejó patente su influencia, como se puede ver en el Centro de Comunicaciones de Yamanashi.
Centro médico de Oita
En 1963 fundó su propio taller en Tokyo, al que dio su nombre,
Arata Isozaki Atelier. Hasta mediados de la década realizó sus mejores obras, entre las que se pueden citar las realizadas en Niage-cho Oita (prefectura de Oit), como el Centro Médico, la casa y clínica Nakayama, el Banco Mutualidad Fukuoka y, principalmente, la Biblioteca de la prefectura de Oita.
En 1967 trabajó en el plan de Osaka y fue contratado como arquitecto jefe de la Expo'70, acontecimiento internacional concebido como celebración del rápido crecimiento del país durante la década. A Isozaki se encargó la Festival Plaza, las instalaciones de los espacios de exposición.
Museo de Arte Moderno de Gunma
Se quería conseguir un espacio teatral que contuviera gran número de espectáculos y público, con elementos informatizados y variedad de tecnología que creara un medio ambiente cibernético. Dos robots, capaces de albergar diez mil personas, estaban equipados con gradas y escenarios móviles manejados por ordenador, al igual que las instalaciones de luz y sonido que, aunque no fueran muy sofisticadas, eran capaces de moverse por el espacio del escenario, creando en el espectador la sensación de encontrarse en un espacio tecnológico vibrante.
En 1973 contrajo matrimonio por tercera vez; su esposa, Aiko Miyawaki, era una importante escultora cuya relación con importantes personas del arte moderno será un factor importante para su obra posterior, así como también su atracción por las actividades de vanguardia del neodadaísmo de Tokyo de la década de los años sesenta.
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Con el Museo de Bellas Artes de la prefectura de Gunma (Takasaki, 1971-74), Isozaki buscó nuevas propuestas que encontró en formas esenciales y estructuras prismáticas. Utilizó como unidad volumétrica el cubo para ordenar las distribuciones espaciales, según la necesidad funcional. La propuesta consiste en la colocación, en una gran extensión verde, con carácter paisajista, de una estructura básica de cubos de 12 metros de lado, que forman un prisma principal donde está la sala de exposiciones, y dos secundarios, uno perpendicular al cuerpo principal, donde está la entrada, y otro oblicuo colocado sobre un estanque de agua, en el que se encuentra la sala de arte tradicional.
Centro de Himalaya
Otras obras importantes son la Biblioteca Central de Kitakyushu (Fukuoja, 1974) y el Museo de Arte Contemporáneo de Los Ángeles (1981-86). En España realizó varias obras importantes como el Palacio de deportes de Palafolls (Barcelona, 1987) y el Palacio de Deportes de San Jordi en Montjuic (Barcelona, 1983-90), este último realizado para los Juegos Olímpicos del 92. El edificio, al que se accede desde una plaza situada al norte, incluye una pista de hockey-hielo y una de atletismo de 200 metros. La cubierta es una cúpula hecha con una estructura en forma de malla espacial doble diseñada específicamente para el recinto.
Para ver más información de Arata Isozaki da clic aquí:
http://www.arq.com.mx/tag/Arata+Isozaki
Arata Isozaki
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